miércoles, 29 de febrero de 2012

El Santander abre hasta tarde

Más que un post esto es un apunte. Lo he visto y no he podido contener las ganas de reflejarlo en en blog para que quede constancia.

Paseando por una de las calles más céntricas de München, pasadas las siete de la tarde, me pareció que había luz en uno de los bancos más conocidos de España: el Santander.

Me pillaba de camino y pasé, finalmente, al lado. Me quedé atónita al ver que no dejaba de entrar y salir gente. "No puede haber tantos cajeros", pensé. Y no, no los hay pero no les hacen falta.

Los trabajadores del banco estaban allí con las puertas abiertas de par en par y una sonrisa en la cara
atendiendo a todo el que entraba.

En España lo de la sonrisa suele estar casi descartado (y eso viene de antes de la crisis, todo hay que decirlo) y lo de trabajar hasta tarde en un banco, de cara al público no lo he visto nunca... Ver para creer. Spain is diferent o al revés?

Productos 'Made in Spain'

En España producimos pocas cosas, por no decir nada (y así nos va). Pero todavía mantenemos ciertos productos alimenticios de lo más demandados fuera y dentro de nuestras fronteras.

Me ha resultado más que curioso ir a diferentes supermercados locales y toparme con productos españoles. Lo cierto es que al hacer la compra en España con lo que suelo encontrarme es con esos mismos productos traídos de cualquier otro rincón del planeta.

Así que estando por München puedo comprar a cinco minutos de mi casa todo lo necesario para hacer una ensalada con productos de nuestra tierra, pero si trato de hacer lo mismo en España me los venden de fuera...

No acabo de entender mucho esa lógica: producimos poco y lo que producimos lo exportamos teniendo que importar después esos mismos productos... Se me viene a la cabeza una frase de la gran Mafalda: "Paren el Mundo que me quiero bajar"

El transporte público no es gratis... aunque lo parezca

Para empezar hay que aclarar que aunque muchos así lo piensen, el metro no es gratis (una de las pocas palabras que compartimos con el alemán y que guarda el mismo significado). Como en cualquier otro lugar para usar los medios de transporte se requiere un pago.

Como aquí no hay que pasar por tornos ni similares (como ya se comentó en un post anterior) muchos piensan que pueden utilizarlo a su antojo sin que se les cobre por ello. Gran error. La policía es fácil de localizar (por sus uniformes) y cualquiera, más o menos espabilado puede 'esquivarles' si lo desea, pero ellos no van a pedir los tickets, ni tienen intención de hacerlo.

Para poder controlar, en la medida de lo posible, que se respetan las normas, revisores vestidos de paisano actúan cuando uno menos se lo espera. Ayer mismo ví cómo le tomaban los datos a una chica y le hacían pagar una multa.

Funciona su sistema porque confían en que la gente sabe lo que tiene que hacer y lo va a hacer, sin más. De momento, hay revisores por si algún listillo se cuela. De aumentar la situación imagino que tendrán que tomar otras medidas, como las más que conocidas en España. Sería una lástima.

lunes, 20 de febrero de 2012

Wir lieben Muenchen

Y no es para menos!

Cuando uno viaja al extranjero tiene el extraño proceder de intervenir cuando escucha su lengua materna. Es algo así como sentirse en casa por un momento, calentito y a salvo. De repente puedes expresarte a tus anchas sin balbuceos. Las palabras fluyen solas. Y no sólo te acercas a esa (o esas) personas extrañas sino que se crea un ambiente ideal para contarse todo tipo de cosas desde el minuto uno.

Cuando uno interviene en una conversación y habla con alguien como si le conociera de toda la vida, se sincera. La verdad es que ya he escuchado por aquí a unos cuantos españoles (algo que siempre alegra, para qué nos vamos a engañar)

Hoy mismo, en la escuela de idiomas se nos ha acercado un chico de Cádiz llegado hace tan sólo tres días a tierras germanas. Enseguida le hemos incluído en la charla y no ha podido faltar el tema estrella: la crisis en España.

La falta de trabajo, el empobrecimiento y unas expectativas más que negras han hecho que muchos optemos por un cambio de aires. Nuestro nuevo 'amigo' se ha mostrado de lo más triste por la situación, casi como si fuera una derrota personal. Todos nos hemos quedado pensando....

Tanto los españoles como los italianos que estábamos reunidos coincidiamos en dos cosas: nuestros países son muy bellos pero no se puede vivir en ellos. Así que sí, acabas 'amando' este lugar porque como lo fuera América, parece la tierra de las oportunidades.

En realidad, no es nada del otro mundo. Dan ayudas a quienes lo necesitan, hay trabajo, si has estudiado puedes encontrar un trabajo cualificado... Cosas normales, con salarios normales, casas normales... Repito lo de 'normales' porque desde fuera nos parece un lujo que puedan comprar una casa, que tengan trabajo o que se les page por dicho trabajo pero... no lo es. Estamos entrando en un círculo tan vicioso y oscuro que apenas vemos las cosas con claridad.

Años quedan para que la situación empiece a normalizarse en España. Serán tiempos duros. La llevamos en nuestro corazón pero nos alegramos de que fuera nos acojan de esta manera.

miércoles, 15 de febrero de 2012

La ilógica del metro

El metro (die U-Bahn, como aquí lo llaman) tiene dos contrasentidos importantes. El primero de ellos es que da igual que estés dentro o en la calle: la temperatura será la misma. Salvo contadas excepciones (las más grandes e importantes) a alguna persona se le ocurrió la genial idea de que sean abiertas. Bajo techo sí, pero sin puertas y un piso por debajo con lo que no sólo hace viento sino que se crean corrientes... Quizá no repararon mucho en el clima del lugar...

La segunda es que, a veces, da la sensación de que no hay salida. Como si estuvieras en mitad de El Corte Inglés. La cuestión es que bajas del metro, subes las escaleras del andén y... otro andén... No se ven escaleras ni nada... Todo es sabérselo. Hay que caminar hasta que al final y al contrario del sentido por donde sube la gente hay unas escaleras. Parece una tontería pero he visto a unos cuantos buscando lo mismo. Como tampoco son muy dados a las señales pues...

Pero les gusté o no (por aquello del sector automovilístico del país) somos unos cuantos lo que utilizamos el transporte público (pese a la carrera de obstáculos que supone: bajas temperaturas en el interior, suelos resbaladizos, precios altos, colapso de gente, baja frecuencia, conexiones absurdas, recorridos inventados...) Esto último ocurre con los autobuses. A veces, el conductor opina que ir por otras calles y llegar a una parada de destino distinta es mejor...

martes, 14 de febrero de 2012

Prepara tu vestuario

Pese a ser una persona a la que le encanta el invierno tengo que decir que hasta ahora no estaba acostumbrada a tan bajas temperaturas. El hecho es que día sí día también amanece con las calles nevadas, estampas preciosas por doquier y... suelos que resbalan, metros que se colapsan y cuerpos que se resienten.

Para evitar caer enfermo (algo que es casi inevitable) es más que recomendable hacerse con una camiseta y plantillas térmicas, unas buenas botas, gorro y guantes.

He vivido en mis propias carnes lo que supone ir abrigado (como lo haríamos en Madrid. Está claro que en España también hay zonas donde hace frío. Y mucho. Pero aquí es algo natural hablar de 20 grados bajo cero y alegrarse por alcanzar los -6 grados). Además es una constante. De vez en cuando allí nieva y es casi un acontecimiento, pero aquí es a diario.

De todas maneras si alguno cae en la trampa de pensar que trae en la maleta ropa de abrigo (sin ser así) os diré que cuentan con unos caramelos para quitar el dolor de garganta que funcionan bastante bien. Y el resto, como en cualquier otro sitio: reposo, medicinas, mucha agua...

Queda mes y medio de frío invernal, según las estimaciones y teniendo en cuenta lo ocurrido en años anteriores. Esperemos que con el sol y unas temperaturas más elevadas la gente de aquí se anime más a salir a la calle.

lunes, 6 de febrero de 2012

Nada que... pescar

Dicen que 'en la variedad está el gusto' y que 'lo poco gusta y lo mucho cansa'. Ambos refranes han debido pasar desapercibidos para los alemanes, en lo que a gastronomía se refiere.

Es lógico que al cambiar de lugar de residencia se tengan que modificar unas cuantas costumbres, entre ellas las culinarias. No se puede esperar encontrar los mismos platos allá por donde viajes. Una cosa es eso y otra muy distinta es no dar siquiera con los ingredientes básicos.

No esperaba encontrarme agua de azahar (para dar a conocer nuestro típico roscón por aquí o el arroz SOS para hacer una paella) pero eso de que resulte una misión casi imposible comprar pescado fresco no me lo podía imaginar. Pero así es.

Para quienes como yo quieran mantener, en la medida de lo posible, una dieta variada pueden dar con este producto en algunas tiendas como: Edeka, las ya mencionadas (en otro post) Galerias Kaufhof y en algunos supermercados de la cadena Real.

Para dar y tomar siempre tendréis carne, más carne e infinidad de salchichas :)